_
_
_
_
_

“Ahora ninguna decisión es libre”

El actor Luis Tosar interpreta en 'Operación E', dirigida por Miguel Courtois, a un campesino colombiano contra todo un sistema que pretende devorarle

Rocío García
Luis Tosar, fotografiado en el último festival de San Sebastián.
Luis Tosar, fotografiado en el último festival de San Sebastián.JESÚS URIARTE

Hay algo de esperanzador en esa lucha titánica y solitaria de un campesino colombiano contra todo un sistema que busca devorarle. A Luis Tosar le gusta resaltar ese aspecto del personaje real que interpreta en la película Operación E, que hoy se estrena en España y que fue presentada en el último Festival de Cine de San Sebastián. El actor no oculta que quizás el papel de José Crisanto Gómez, el campesino al que la guerrilla colombiana de las FARC le entregó el hijo de la abogada secuestrada Clara Rojas a primeros de enero de 2005, es el que mayores dificultades le ha reportado en su carrera. “Es un personaje con una mochila cargada de muchas cosas que infundían respeto y añadían una responsabilidad especial que no suele tener la mayoría de los personajes, que son pura ficción y como pura ficción los tratas. La historia de Crisanto es todavía más rocambolesca de lo que contamos en Operación E. Representa a millones de personas que viven o han vivido una situación similar. Nunca había estado tan asustado, tan aterrado antes de empezar una película. Mi mayor paranoia era no bajar el nivel de atención y alerta para que el acercamiento a toda esta gente fuera lo más respetuoso posible, no solo a José Crisanto sino a todo un pueblo”, reflexiona Luis Tosar (Lugo, 1971), quizás uno de los actores españoles menos afectados por la crisis de la industria española, que hoy estrena también Una pistola en cada mano,de Cesc Gay.

Menos afectados, desde luego, pero también por empeño personal. En Operación E, dirigida por Miguel Courtois (El Lobo o GAL, entre otras), ha sido crucial su participación como coproductor para que el proyecto saliera adelante. “Tuvimos muchos problemas de financiación básicamente por cuestiones de identidad. Surgió como un proyecto francés, pero luego se buscó coproducción en España. Yo me enganché en la historia solo como actor, pero al estancarse la película le propuse a mi socio meter dinero para lograr dar el impulso definitivo”. Aunque no es la primera vez que el actor de Te doy mis ojos, Los lunes al sol o Celda 211 (los tres premios Goya) entra en la producción, sí es Operación E su proyecto más grande. “Merecía la pena, tenía algo que agarraba y tiraba de mí”.

El destino trágico de José Crisanto Gómez, amenazado por la guerrilla, los paramilitares y el propio estado colombiano, preso cuatro años y, finalmente, libre sin cargos, es, según Tosar, el mismo que sufren millones de mujeres y hombres como él. “Su caso no deja de ser una representación de todo lo que sucedió en Colombia, una realidad dura y triste pero que es extensible a muchos conflictos del mundo entero. De unos somos más conscientes y de otros menos. En el caso de Colombia es un conflicto muy mediático, incluso glamouroso a veces, por ese toque romántico que imprimen algunos ejércitos revolucionarios. Pero la realidad es que se encuentran en un conflicto enquistado, con más de cuatro millones de desplazados que deambulan por el país en condiciones miserables”.

En ‘Operación E’ da vida al campesino que cuidó del bebé de Clara Rojas

Luis Tosar, bigote con aire mexicano por la película que ha terminado de rodar, Los fenómenos, de Alfonso Zarauzas, sobre la burbuja inmobiliaria, defiende que Operación E es algo más que una película para él. “Su contenido es directo y fuerte. Siendo un tópico, me gustaría que calase de alguna manera en el espectador, más allá del puro entretenimiento, de contar una historia que puede ser más o menos excitante sobre las aventuras y desventuras de un hombre que está en un fuego cruzado y que sobrevive como puede”, reflexiona el actor. “Hay también algo de esperanzador de cómo un solo hombre se enfrenta a todo un sistema, pone en jaque a un país y, en un momento dado a dos, y lo hace por pura necesidad porque no le queda otra alternativa. Ninguna de las decisiones que tomó fueron libres, todas estuvieron condicionadas por un factor o por otro. Es lo mismo que estamos viviendo aquí y en los países de nuestro entorno con la crisis. Ninguna decisión ahora es libre. Todo está condicionado por lo que te imponen desde arriba. A pesar de esto, el caso de Crisanto es el de un hombre solo contra toda una maquinaria, lo cual es bastante ilustrativo. Somos millones y millones de personas y parece que no somos capaces de hacer que se mueva ni la más pequeña tuerca de toda esta maquinaria”.

En Colombia, durante el rodaje de Operación E, Tosar se encontró con una efervescencia cultural y social, desaparecida ahora en Europa. “Los europeos estamos viejos. Hemos perdido la juventud hace tiempo. Tenemos que empezar de nuevo, luchar para no caer en la debacle”.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_