_
_
_
_
_

Doctor Jorge y míster Sanz

David Trueba estrena un nuevo episodio de '¿Qué fue de Jorge Sanz?'

Jorge Sanz y David Trueba, durante el rodaje de '¿Qué fue de Jorge Sanz?'.
Gregorio Belinchón

La vida le va bien a Jorge Sanz. Ha dejado el alcohol, despedido a su fiel representante Amadeo, más entendido en quesos que en contratos de actores, logra ganar algo de dinero en publicidad y va a rodar en Hungría "una con Penélope Cruz", le han dedicado una estatua en el madrileño Museo de Cera y en el asunto sentimental está encadenando novia tras novia.

Más información
Jorge Sanz: en la pantalla como en casa
El actor feliz
“El humor ayuda a distinguir lo importante de lo cosmético”

Y sin embargo, en su naturaleza está el error, los trompicones emocionales y una capacidad innata por estropear todo lo que toca. Al menos, el Sanz de ¿Qué fue de Jorge Sanz?, la serie de David Trueba cuyo episodio 8, rodado durante 2016 y titulado Jorge Sanz vuelve... a ser Jorge Sanz, se estrena esta noche a las 22.00 en Movistar Series (dial 11). "Cada mañana cuando me levanto me pregunto: '¿Y por qué no hago bicicletas en vez de la serie de David?", ríe el actor, consciente de que muchos espectadores confundirán el Sanz personaje del Sanz real. "No mientas", intercede Trueba. "Lo que te preguntas es por qué no eres George Clooney". La alusión tiene relación directa con uno de los chistes de la nueva entrega de este proyecto con el que llevan desde 2010. "No queríamos exprimirlo de forma desaforada, y por eso hemos apostado por un proceso más lento, de acompañamiento a Jorge para que la historia y sus personajes vayan madurando", cuenta más en serio su director. "Aunque el último episodio podría ser con Jorge y conmigo enfermos de alzhéimer".

Con un rodaje tan largo, a Sanz le ha dado tiempo a disfrutar cada momento. En verano una noche inauguró una estatua el Museo de Cera de Madrid con banda de fondo y Elena Furiase de madrina. Si David Trueba disfrutaba con el escenario, los extras, la música de pasodoble y el director de la institución, a Sanz se le veía como un niño jugando con sus coches favoritos. "Es que con el tiempo he aprendido a disfrutar de mi otro yo. A coger distancia del personaje, a imprimirle más ironía y diversión. El juego que arrancó David me tiene ya atrapado", cuenta el aludido. "Por supuesto que el Sanz de televisión hace cosas que yo jamás ni me plantearía. Y desde luego yo no haría como Valérie Tasso, la escritora de Diario de una ninfómana, lo de probar las cosas antes de plasmarlas en su caso en papel y en el mío en la pantalla".

El actor y su falsa figura del Museo de Cera.
El actor y su falsa figura del Museo de Cera.

Con una grabación tan larga —en el que la pareja incluso ha aprovechado el trabajo del intérprete en La reina de España, donde retoma a su galán Julián Torralba, y su rodaje en Budapest para desarrollar en esa filmación parte del episodio— el montaje ha necesitado su tiempo. "Yo doy mucho el plasta en el montaje, porque como no lo controlo... En realidad, rodamos, a veces incluso yo voy por libre, y posteriormente la auténtica labor de testa se da en la mesa de edición", cuenta el protagonista. "Mira, disfrutamos mucho del trabajo, pero sigue siendo trabajo, y hay que entregarlo bien, con lo que se provocan esfuerzos y tensión. Nosotros garantizamos a todos los que participan en la serie que rodamos en un ambiente distendido... y luego ya seré yo el que sufra, que para eso me pagan".

"No me importa que confundan con el personaje, te digo ahora en serio. Deviene parte del juego"

Habrá más episodios. "Y no me importa que confundan con el personaje, te digo ahora en serio. Deviene parte del juego. A mí me llevan confundiendo con uno que canta -con don Alejandro- desde hace años y me parece maravilloso", dice Sanz. A su lado, Trueba subraya: "Una de las cosas que quiere contarle la serie al espectador es que cuando cree que conoce a alguien porque lo ve en televisión o en cine en realidad no sabe quién es". Y el actor apostilla: "¿Qué quieres que te diga? Los dos personajes que más alegrías me han dado en la vida son Torralba y Jorge Sanz".

Con un reparto de lujo

Entre carcajadas Jorge Sanz cuenta que el momento sexual que sufre su Julián Torralba en La reina de España ha logrado aplausos en cada pase al que él ha asistido. "Yo lo entiendo, es que apetece que le pase eso a ese personaje", cuenta el actor, sobre una secuencia que parecería escrita para ¿Qué fue de Jorge Sanz? ¿Podría ser que Jorge Sanz estuviera interpretando al Jorge Sanz de ficción encarnando a Torralba en otra ficción? "Yo lo simplificaría", reconduce Trueba, "y te diría que es Cary Grant". De fondo en Budapest, todo el equipo de La reina de España. Para el actor, "todo el mundo entiende lo que hacemos y cada vez quieren participar más".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Gregorio Belinchón
Es redactor de la sección de Cultura, especializado en cine. En el diario trabajó antes en Babelia, El Espectador y Tentaciones. Empezó en radios locales de Madrid, y ha colaborado en diversas publicaciones cinematográficas como Cinemanía o Academia. Es licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense y Máster en Relaciones Internacionales.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_