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El lado oscuro de Helmut Newton

El museo berlinés dedicado al fotógrafo rescata una parte de su obra inédita o menos conocida que explora en la perversidad del ser humano

Fotografía de Helmut Newton publicada en Vogue Francia en 1969.
Fotografía de Helmut Newton publicada en Vogue Francia en 1969.

Helmut Newton conquistó la fama y la riqueza gracias a las fotografías de hermosas mujeres que, a veces vestida y otras desnudas, siempre resultaban lascivas y con un aura de misterio. Su serie Big Nudes, a la que pertenecen los cinco retratos que dan hoy la bienvenida en el museo berlinés que lleva su nombre, le catapultó al incierto honor de ser odiado por las feministas de su país, que le echaron en cara una cierta tendencia facistoide, una acusación algo terrible que sin embargo siempre hacia sonreír a Newton.

Ahora, y gracias a una nueva iniciativa de la Fundación Helmut Newton que administra uno de los museos más exquisitos de Berlín, los admiradores del genial fotógrafo —fallecido hace ya casi nueve años—, tienen la rara oportunidad de admirar no solo el lado más conocido del artista sino también su lado más oculto. Newton tenía un ojo genial para captar luminosas escenas que enloquecían a las revista de moda, pero también era un hombre con fantasías que rozaban lo perverso. Ambas caras se enfrenan ahora para ofrecer una oportunidad única para adivinar los caminos de su personalidad creativa.

En un enorme salón de su museo, ubicado en la calle Jeben de la capital germana, la fundación ofrece hasta el 19 de mayo de 2013 la oportunidad de contemplar varias decenas de fotos realizadas por Newton en la década de los ochenta y los noventa del siglo pasado, muchas de ellas inéditas, que demuestran que era algo más que un fotógrafo famoso de moda.

Una imagen de Dakar en 1971 para el 'Vogue' Francia
Una imagen de Dakar en 1971 para el 'Vogue' Francia

Bajo el titulo Archive de Nuit, el museo muestra a un Newton desconocido que en sus "ratos libres" daba rienda suelta a su imaginación de artista genial. Junto a una serie de fotos que muestran paisajes de la Costa Azul, castillos, catedrales europeas, vistas aéreas y paisajes bucólicos, el fotógrafo recurre, una y otra vez, a su musa eterna, la mujer, pero con un acento diferente.

En la selección Archive de nuit no hay fotos de moda, ni modelos famosas. En cambio, el museo ofrece instantáneas de Newton que muestran a mujeres desnudas en cocinas, en salas con lavadoras, en habitaciones de hoteles, tiradas sobre el piso hablando por teléfono. Las modelos de Newton son a la vez activas y pasivas, caprichosas y melancólicas, domésticas y salvajes y todas muestran, con una claridad asombrosa, que estaban posando ante uno de los fotógrafos más importantes del siglo XX.

Las imágenes que se pueden contemplar en la serie Archives de Nuit no son seductoras, tampoco son glamurosas, pero todas esconden una historia individual de brutalidad, dulzura e ironía. Por ejemplo, la única instantánea hecha en Madrid que se puede ver en la exposición, muestra un montón de sábanas sucias del Hotel Ritz.

La segunda parte de la nueva exposición ofrece la visión más clásica del gran fotógrafo, un gran resumen de su genial instinto para vender moda con una pesada carga de erotismo. World without Men (Mundo sin hombres) es el nombre irónico de la muestra que muestra fotos realizadas en las últimas tres décadas del siglo pasado para las revistas de moda más famosas del planeta.

Fotografía tomada en Montecarlo en 1980 y publicada por 'Vogue' Francia.
Fotografía tomada en Montecarlo en 1980 y publicada por 'Vogue' Francia.

La muestra también es inédita, ya que es la primera vez que el legendario libro de fotos que publico Newton en 1984 con el mismo título se convierte en una exposición y es presentado en su totalidad. En esta sección de la muestra, los hombres solo aparecen como un decorado secundario para no ensombrecer la hermosura y el poder de las musas de Helmut Newton.

“ARchives de nuit y woirld without men” son parte de una sola persona: mi esposo. Él fue brillante, casi un genio y nunca dejó de trabajar como fotógrafo”, dijo June Newton la viuda de 89 años, el día de la inauguración de la exposición.

Newton abandonó Berlín en 1938. A la edad de 18 años, subió a un tren que partía de la famosa estación Banhof Zoo.Sin esa estación no se podría explicar por qué hoy descansa en la ciudad su magnífico archivo. La casualidad quiso que las autoridades de la ciudad ofrecieran a Newton un edificio vacío ubicado a un costado de la famosa estación. Cuando Newton visitó el centro, unex casino de oficiales prusianos, y miró a través de una ventana, pudo ver las vías de tren de la estación. En ese momento, supo que aquel edificio centenario sería su museo.

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