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Los productores que cambian Los Ángeles por Bogotá

Un encuentro resalta las ventajas de Colombia para la industria audiovisual

La serie estadounidense Mental narra las aventuras de un equipo de médicos especializados en analizar la mente humana para resolver las enfermedades de sus pacientes. La trama del programa ocurre en un hospital en Los Ángeles (Estados Unidos), pero el estudio donde trabaja el equipo de producción se encuentra, en realidad, en la capital de Bogotá, Colombia.

El caso de Mental, producido por Fox Telecolombia, no es único. Cada vez son más las producciones internacionales que eligen filmar películas y teleseries en estudios ubicados en el país sudamericano. La cantidad de productores que han dirigido su vista al sur es cada vez más. "El aumento ha sido impresionante de cinco años para acá", afirma Daniel Mesa, realizador colombiano establecido en Madrid y promotor del Encuentro de Productores Madrid-Colombia, organizado en colaboración con la Embajada colombiana en Madrid, para impulsar la colaboración entre España y el que consideran es un importante escenario para la producción audiovisual en América Latina.

El encuentro reunió ayer en el Círculo de Bellas Artes a siete productoras colombianas y 10 madrileñas. "Hay un interés en la televisión y en los productores españoles sobre los proyectos que se están gestando", afirma Mesa.

Otra motivación importante para rodar en Colombia, según afirmaron los organizadores del encuentro, es la Ley de Cine que el país sudamericano aprobó en 2003. La legislación ofrece beneficios fiscales a la inversión de capital privado y, además, brinda beneficios a las productoras españolas para estrenar cine colombiano en Europa. Manuel Soria, director técnico de la Madrid Film Comission, también organizadora del evento, definió a Colombia como "el diamante en bruto de la cinematografía latinoamericana".

Entre las ventajas que ofrece el país no solamente se suma la variedad de escenarios y los bajos costes de producción, sino los recursos técnicos y artísticos con los que cuenta el país, completó Mesa. Betty la fea, Pasión de gavilanes o Sin tetas no hay paraíso son algunos ejemplos del inmenso éxito de las producciones colombianas en el ámbito internacional. Betty la fea, por ejemplo, contó con exitosas adaptaciones en más de 15 países, desde India o Serbia hasta España y Estados Unidos.

Pero la creatividad de los productores colombianos no es el único aliciente para que varios estudios extranjeros, entre ellos algunos anglosajones (Disney y la Fox) dirijan la mirada hacia allá. El cambio de moneda que hacía inviable las inversiones iniciales para las coproducciones se hace mucho más asequible en suelo colombiano.

Mesa explica que la idea de este encuentro, el primero que se realiza en su tipo pero con tal éxito que ya se planea organizar uno cada año, nació "como un encuentro privado" a raíz del interés en "hacer vínculos". El realizador colombiano subraya que su país "está pasando por un muy buen momento en la producción audiovisual", con una creciente inversión extranjera que está comenzando a dar resultados. "En unos años se ha pasado de estrenar de tres a cuatro películas colombianas a producir en promedio 15 cada año. La meta es aprovechar que esto se convierta en una industria que consiga consolidarse".

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