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Kim Jong-un consolida su poder en vísperas del lanzamiento del cohete

El régimen nombra al líder norcoreano presidente de la Comisión Militar Central

Soldados norcoreanos en Pyongyang.
Soldados norcoreanos en Pyongyang.PEDRO UGARTE (AFP)

Kim Jong-un, que ascendió al trono de la dinastía comunista que gobierna Corea del Norte tras la muerte de su padre, Kim Jong-il, en diciembre pasado de un infarto, consolida su poder poco a poco. El régimen le ha nombrado presidente de la Comisión Militar Central del Partido de los Trabajadores y miembro permanente del Politburó, según ha anunciado hoy la prensa oficial. Además, ocupará el puesto de primer secretario del partido, un cargo de nueva creación que coincide con la inmortalización de su padre, quien a partir de ahora será “secretario general eterno”. Kim Jong-il entra así en la Olimpo del país más aislado del mundo, de la misma forma que lo hizo su padre y predecesor, Kim Il-sung, quien fue designado “presidente eterno” tras su muerte en 1994.

Los nombramientos, realizados en una reunión especial del partido celebrada el miércoles, permiten entrever cómo va a gestionar el régimen la transición de poder y presagian que el joven Kim Jong-un será tratado con el mismo halo divino que sus antecesores. La televisión estatal ha mostrado hoy al nuevo líder –que aún no ha cumplido los 30 años- sentado en el cónclave del partido cerca de las estatuas blancas de su abuelo y una estatua reciente de su padre vestido con su característico uniforme de trabajo y una mano en la cadera, informa Associated Press.

Los delegados del partido han colocado también a una generación de dirigentes más jóvenes en puestos claves. Además, han nombrado a seis nuevos miembros del Politburó, incluido Jang Song-thaek, que está casado con la hermana menor de Kim Jong-il, Kim Hyong-hui.

Estos movimientos en las estructuras de poder se producen en vísperas de las celebraciones que tendrán lugar este fin de semana en Pyongyang para conmemorar el 100 aniversario del nacimiento de Kim Il-sung, fundador del país en 1948. Unos fastos cuyo punto álgido serán el desfile militar el domingo en el centro de la capital y el lanzamiento de un cohete -entre hoy y el lunes-, que, según Pyongyang, está destinado a colocar un satélite de investigación en órbita. La maniobra ha provocado la ira de Estados Unidos, Japón y Corea del Sur, entre otros, que la han calificado de provocación y denuncian que se trata de la prueba encubierta de un misil balístico de largo alcance, lo que supone una clara violación de las resoluciones de la ONU. Los expertos aseguran que el cohete Uhna-3 es muy similar al que podría ser utilizado para transportar una cabeza nuclear. Los actos ha sido organizados no solo para festejar el centenario de Kim Il-sung, el 15 de abril, sino para mostrar al mundo que Kim Jong-un ha consolidado su poder.

Pyongyang afirma que todo está listo para el lanzamiento del cohete, que, según dice, es “un regalo” para Kim Il-sung. El miércoles afirmó que estaba dando el último paso antes del despegue: la inyección del combustible. Paek Chang-ho, jefe del centro de mando espacial, dijo que el cohete está listo para ser disparado en cuanto reciban luz verde. Dado que se trata de un líquido altamente volátil y corrosivo, la inyección del combustible en una de las últimas maniobras antes del lanzamiento. El inicio de la cuenta atrás dependerá, entre otras razones, de las condiciones meteorológicas.

El primer ministro de Japón, Yoshihiko Noda, ha asegurado que su país está en alerta y listo para hacer frente a cualquier contingencia. Tokio ha desplegado misiles tierra-aire y barcos destructores dotados con misiles para derribar el cohete en caso de que se salga de su trayectoria. Está previsto que la primera etapa del proyectil caiga al mar Amarillo, entre Corea del Sur y China, y la segunda lo haga unos 140 kilómetros al este de la isla filipina de Luzón, a unos 3.000 kilómetros de la base de lanzamiento.

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El testamento de Kim Jong-il

Corea del Norte ha intentado en otras dos ocasiones lanzar un satélite, en 1998 y 2009, pero Washington afirma que no hay evidencias de que llegaran a órbita. ¿Significa esto que en realidad lo que quería Pyongyang era probar un misil balístico como afirma Estados Unidos? El testamento de Kim Jong-il que ha salido hoy a la luz en Japón podría aportar nuevos datos a la política armamentística norcoreana si se confirma que es real.

Un científico que huyó de Corea del Norte en 2001 asegura que ha obtenido una copia del documento con las últimas voluntades del llamado ‘Querido Líder’, en el que este urge al país a desarrollar armas de destrucción masiva. “Tened siempre presente que desarrollar y mantener de forma continua (armas) nucleares, misiles de largo alcance y armas biológicas es la forma de conservar la paz en la península coreana. Nunca bajéis la guardia”, señala el supuesto testamento, según la revista japonesa Shukan Bunshun, informa France Presse.

Lee Yun-Keol, director del centro de pensamiento surcoreano NK Strategic Information Service Center (NKSIS), obtuvo la copia de “una persona muy cercana a un alto funcionario norcoreano”, señala la publicación. Lee, de 44 años, estudió en una escuela científica de élite en el Norte antes de huir en 2001. Llegó a Corea del Sur en 2005. Según NKSIS, trabajó en su país en una organización estatal encargada de promover la salud y la longevidad de Kim Il-sung y Kim Jong-il.

“Tenemos que ganar la guerra psicológica con Estados Unidos. Manteniéndonos en pie de forma imponente como una potencia nuclear legítima, tenemos que debilitar la influencia americana en la península coreana y trabajar hacia el levantamiento de las sanciones internacionales que permitan conseguir las condiciones externas para el desarrollo económico”, dice el testamento.

En él, Kim Jong-il se refiere también a China –su principal aliado-, sobre la cual lanza un mensaje de advertencia. “Es el país que actualmente tiene una relación más cercana con nosotros, pero podría convertirse en el país que más tengamos que vigilar en el futuro. Históricamente, China es el país que ha forzado dificultades sobre nuestro país. No olvidéis esto y tened cuidado (…) Evitad ser explotados por China”. Algunos académicos y expertos en política coreana creen que Kim Jong-il dejó un testamento escrito y que el Gobierno surcoreano tiene una copia.

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