Negan, el agitador feroz
La brutalidad del nuevo villano de 'The Walking Dead' es lo que la serie necesitaba para mantener el interés en la séptima temporada
Hay series redondas, como Los Soprano, que lo único que necesitan es seguir contando su historia hasta el final, sin necesidad de cambiar de carril, con la fuerza de sus personajes imperturbable. Pero hay otras que, aunque sigamos enganchados a ellas, por muy populares que sean, se agotan, entran en un circuito cerrado en el que parece que pasan una y otra vez por la línea de meta. El ejemplo más reciente: The Walking Dead hasta el penúltimo capítulo de la sexta temporada.
La serie de zombis, caminantes o infectados, como se quiera llamarlos, es un éxito, una de las ficciones más vistas, comentadas y alabadas en la televisión mundial. Tiene virtudes –y grandes capítulos– más que de sobra para serlo, pero en la recta final de la sexta entrega el círculo eterno en el que entraron las tramas olía ya demasiado mal. Ese vamos por el bosque-encontramos un lugar seguro-hay una gran amenaza-nos enfrentamos a ella-todo queda destrozado-vencemos porque somos más macarras que nadie, pero, volvemos al bosque-encontramos un lugar seguro… empezaba ya a ser cansino.
El inicio de la séptima temporada (estrenada hace poco en Fox) ha roto con todo en un capítulo en el que un personaje, el nuevo villano Negan, ha agitado todo lo establecido. Fue un episodio desagradable, que no ha gustado a todo el mundo. Por la violencia, por la muerte de dos personajes principales, en especial uno de ellos, y por el supuesto innecesario ensañamiento de Negan con los protagonistas. Muchos vieron el capítulo con cara de asco, muchos han dicho que hasta aquí han llegado, que ya no quieren seguir viendo la serie. Pero a muchos otros nos ha parecido que la aparición de este agitador es justo lo que The Walking Dead necesitaba después de más de un lustro. Un personaje que parece imbatible, que ha echado por tierra todo el espíritu del protagonista Rick Grimes y que ha dado a esta ficción lo que ya se veía en el cómic original y que a ratos últimamente se echaba de menos: ferocidad y ruptura del círculo del bosque (esperemos).
