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CRÍTICA / DISCOS

Un barco al rescate de Brian Eno

A lo largo de sus cuatro composiciones, 'The Ship' sintetiza algunos de los elementos que convirtieron a Eno en un pionero

A veces da la sensación de que la música de Brian Eno se diluye en experimentos que difícilmente logran fascinar tanto como en el pasado (una de sus últimas obras innovadoras quizá sea Nerve Net, publicada en 1992). Se echan en falta pues discos relevantes creados por una mente tan lúcida como la suya y, precisamente por eso, esta obra aparece en el momento adecuado. A lo largo de sus cuatro composiciones, The Ship sintetiza algunos de los elementos que convirtieron a Eno en un pionero durante las décadas de 1970 y 1980, al fusionar aquí minimalismo y canción pop para construir algo que va más allá de la suma de ambas partes. El tema titular comienza deslizándose por el ambient para ir transformándose en algo fantasmagórico cercano a las atmósferas que trabajó con Bowie tanto en la etapa berlinesa como en 1.Outside (1995). El tono sombrío impuesto en el comienzo se incrementa con Fickle Sun (i), impulsado por un crescendo que divide el tema en dos, marcado por las intervenciones de la guitarra de Leo Abrahams. Eno ha declarado que se inspiró en el hundimiento del Titanic y en la I Guerra Mundial, pero el aire elegiaco de la primera parte de Frickle Sun y el matiz europeo que adquiere su voz —que por momentos recuerda a la Nico de Marble Index (1969)— sugieren que quizá la muerte también esté presente de otras maneras en este álbum, cuyas notas mencionan a Dawn, mote que Bowie usaba cuando se escribía con Eno.

Los dos temas finales contrarrestan la oscuridad de sus predecesoras. Fickle Sun (ii) The Hour is Thin es una breve pieza de piano recitada por Peter Serafinowicz, mientras que Fickle Sun (iii) I’m Set Free es una inesperada —pero precisa y acertada— versión de uno de los temas pastorales del tercer álbum de The Velvet Underground. Una composición firmada por Lou Reed que aquí funciona como broche redentor para una obra que explora parajes oscuros, haciendo crecer de nuevo a su autor y devolviéndole a lo más alto de ese nivel creativo que tan bien sabe ostentar.

The Ship. Brian Eno. Warp / Music As Usual

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