Una sorpresa inesperada
El relato es funcional, pero hay diseños de personajes imaginativos, riqueza de texturas, escenas poderosas
Especializada en facturar cortos de animación 3D para salas IMAX y parques temáticos, la productora belga nWave Pictures ha dado un salto considerable con La casa mágica, una película cuya ambición estética se coloca a muy larga distancia de las precedentes Vamos a la Luna (2008) y Las aventuras de Sammy, un viaje extraordinario (2010). Co-dirigida por Ben Stassen y Jeremy Degruson, La casa mágica parte, de hecho, de una de esas pequeñas piezas de nWave Pictures para parques de atracciones y relata la singular peripecia de un gato abandonado, que recala en la casa de un viejo prestidigitador amenazado por las especulaciones inmobiliarias de su sobrino.
LA CASA MÁGICA
Dirección: Ben Stassen y Jeremy Degruson.
Animación.
Género: Aventuras. Bélgica-Francia, 2013.
Duración: 85 minutos.
El relato es funcional, pero hay diseños de personajes imaginativos –la bombilla antropomórfica Edison, el conejo antagonista-, riqueza de texturas e iluminación, escenas poderosas –la casa transformándose en túnel del terror-, y una muy singular tendencia al abigarramiento del plano. Toda una sorpresa.