Cómo leer en Chile

Sin la fuerza del gigante, México, ni el relumbrón de Argentina, más habituada a los focos, pero precisamente por ello como laboratorio real, discreto y excepcional en Latinoamérica: algo se mueve en Chile, sin duda, en el ámbito de la literatura, la edición y las nuevas tecnologías.

Se puso de manifiesto días atrás, durante el II Seminario Internacional ¿Qué leer? ¿Cómo leer? Lecturas de juventud, organizado por el Ministerio de Educación, la Universidad Diego Portales y la editorial Ekaré Sur. De su ponencia magistral a cargo de Néstor García Canclini, que alertó sobre el error de creer que los jóvenes no leen porque no lean libros, a mesas tan brillantes como ¿Está Google volviéndonos estúpidos?, el certamen demostró que los autores, editores y educadores chilenos están muy atentos a los cambios en el sector, y en algunos casos incluso a la vanguardia.

Buen ejemplo de ello es el narrador Jorge Baradit, un abanderado del empleo de la Red y las redes en sus obras desde una concepción transmedia: para lanzar su novela gráfica Policía del karma, el autor preparó ya en 2011 tal despliegue (con banda sonora propia, un mockumentary o falso documental por episodios, clips audiovisuales y otras acciones digitales resumidas aquí) que al final intervino hasta la auténtica policía chilena por sus “actividades de reclutamiento”. Mientras el autor de Ygdrasil continúa demostrando que lo suyo no es marketing viral, sino una misma obra disgregada en múltiples plataformas (la última, con Lluscuma), la nueva edición de la denominada Furia del Libro reunió en Santiago a lo más activo de la edición independiente chilena, que sigue apostando por el papel y la protesta por los impuestos sobre el libro tradicional, pero que no renuncia al apoyo de Internet: uno de los títulos estrella del evento, el Facsímil de Alejandro Zambra publicado por la fulgurante Hueders, recupera las pruebas de aptitud preuniversitaria del país para ofrecer un artefacto narrativo de-moledor que, pese a recrear un test a lápiz, posee su propio booktráiler.

Cierto es, con todo, que aún hay ámbitos por desarrollar, del mercado de e-books y e-readers, aún incipiente, al de la experimentación en podcast, donde iniciativas como la de Radio Qué Leo, con perlas como las 15 ediciones del infantil Donde viven los monstruos, de Esteban Cabezas y Sara Bertrand, prometen pero andan aún lejos del fenómeno que es en toda Latinoamérica, Chile incluido, la multipremiada Radio Ambulante: historias radiadas del mejor periodismo narrativo, elegidas en todo el mundo de habla hispana y elaboradas desde San Francisco por el escritor Daniel Alarcón y la emprendedora Carolina Guerrero. Es, sin duda y más allá de su Premio García Márquez, de lo mejor que literariamente se puede oír hoy en la Red. Pruébenlo en radioambulante.org o en su Twitter @radioambulante, y si tienen dudas empiecen por La concursante. Y en todo caso, antes o después, sigan navegando hacia las aguas online de la edición en Chile: no tardarán en romper… moldes.