_
_
_
_
_

Las bibliotecas y el saber

Centros adaptados a una sociedad consumidora de imágenes y productos digitales

'Mapamundi' de Ignasi Aballí.
'Mapamundi' de Ignasi Aballí.

Para conmemorar su vigésimo aniversario, el Koldo Mitxelena ha organizado esta exposición que gira en torno a la biblioteca y a cuestiones como su función, su transformación o los desafíos a los que se enfrenta en una sociedad consumidora de imágenes y productos digitales que generan nuevas formas de conocimiento.

Entre las obras de la muestra destacan las fotografías de bibliotecas de Höfer, realizadas con la perfección técnica y el rigor conceptual característicos del movimiento de la Nueva Objetividad, surgido a finales de los años ochenta en Alemania, en el que se puede enmarcar su obra. Se pueden contemplar también dos impactantes creaciones en las que se destruye el espacio de almacenamiento del conocimiento. En la videoinstalación Fuego frío II (2003-2014), del artista conceptual Eugenio Ampudia, los libros arden virtualmente en una estantería para transmitir la idea de que el conocimiento albergado en las bibliotecas debe ser socializado. El fotomontaje Cosmology (2013), de Pablo Genovés, muestra la destrucción de una suntuosa biblioteca por la irrupción alegórica de aguas desbordadas de una naturaleza dominada por la digitalización del saber.

La pasión por la lectura está representada en la pieza Ex Hypothesi (1999), de Kosuth, uno de los pioneros del arte conceptual. La materia que conforma la obra es un párrafo serigrafiado sobre plexiglás del maravilloso relato de Borges, La biblioteca de Babel, en el que el escritor describe el universo como una biblioteca, un espacio que “se compone de un número indefinido, y tal vez infinito, de galerías hexagonales”. El fragmento, aislado del texto original, invita a reflexionar, como Borges, sobre la soledad, el absurdo y lo eterno.

Una fascinante obra del artista conceptual Ignasi Aballí, titulada Dos paisajes posibles (2014), realizada con palabras en vinilo en los cristales de las ventanas de Koldo Mitxelena, cierra la exposición. Los textos que clasifican cosas, fenómenos meteorológicos, colores y géneros literarios tienen una apariencia ordenadora, pero funcionan como un diagrama absurdo. La pieza alude a la desconexión entre nombrar y mostrar, pero también indica los aspectos no visibles de la realidad, las articulaciones invisibles del conocimiento y la ausencia, presentes en las bibliotecas.

La biblioteca y el saber. Sala Koldo Mitxele. Urdaneta, 9. San Sebastián. Hasta el 9 de agosto.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_