El flamenco conquista Washington

El sentimiento profundo y la fuerza del cante y baile flamenco han encendido este mes de marzo el fuego en Washington, con un desfile de reconocidos artistas españoles que forman parte del tour Flamenco Festival 2014. Como se lleva haciendo tradicionalmente desde hace años, el Lisner Auditorium, ubicado en el 730 21st St. NW y asentado en la universidad George Washington, abrió sus puertas al acontecimiento, que contó con la colaboración del restaurante Jaleo, cuyo propietario es José Andrés, famoso chef español.

Por lo que, además de disfrutar de la música, los participantes al evento pudieron saborear jamón ibérico, distintas clases de queso manchego, patatas fritas y “picos” -colines de pan- antes de cada actuación.

El martes 18 el teatro cerró el festival en la capital con la presentación del guitarrista de flamenco José Fernández Torres, más conocido como “Tomatito”. Pero realmente no fue el punto final, ya que la guinda la puso Estrella Morente el día 19, a pocos kilómetros de la Casa Blanca, en el Music Center del Strathmore (Maryland).

Morente, al igual que Tomatito y otros, llegaba a Washington de la mano del Flamenco Festival, que nació de manera sencilla en Nueva York en 2001 y ha conseguido expandirse a pasos agigantados gracias al apoyo del Instituto Andaluz del Flamenco y el Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM) de España. En la gira por Estados Unidos y Canadá han actuado más de 200 artistas, en 34 teatros de 25 ciudades.

Morente hizo que el público, puesto en pie, aplaudiera durante más de 10 minutos. La artista fue tradicional en todo su repertorio, recordando a grandes como su padre, Enrique de Morente, o Paco de Lucía, con homenaje incluido y bajándose del escenario a las butacas para interactuar con el público con una maravillosa versión de Volver, famosa en EE UU gracias a la película de Pedro Almodóvar de mismo nombre que Penélope Cruz llevó por el mundo, aunque con voz de la cantaora granadina.

Además, varios artistas españoles han paseado también su arte como un pastel lleno de sorpresas. Kiko Veneno y Fuel Fandango, entre otros, hicieron su aportación durante estos días peculiares, en los que el idioma castellano se oyó con más frecuencia de lo habitual en las calles de Washington y en los que en algunos rincones, incluso, estuvieron presentes los mantones, las peinetas y las castañuelas, para deleite de los estadounidenses, a pesar de que en muchos de los conciertos los espectadores, en su mayoría, fueron españoles.

El flamenco, “algo tan nuestro”, como subrayó Morente, “es algo cada vez más común en las Américas y en el mundo”, y no “solo en su modo tradicional, en el que un artista y su guitarra hacen de hilo conductor de toda la magia, de toda la emoción, de todo este sentimiento”, añadió Kiko Veneno, a las puertas de la sala Tropicalia, asentada en la calle 14, en pleno centro urbano de la ciudad, minutos antes de deleitar a un centenar de personas con sus viejos y nuevos temas.

“Tal vez, la idea sería hacer una rumba o algún tema que realmente encaje entre el público estadounidense, un tema que les enseñe que el flamenco también puede salirse de los cánones de la tradición, sin perder sus raíces”, puntualizó. “Sin perder la esencia de los grandes, como el recién fallecido Paco de Lucía”, continuó este hombre que se despidió de la capital con su Volando Voy, Volando Vengo, para deleite de los presentes.

“Creemos que en estos tiempos es importante adaptar la tradición a los nuevos ritmos, a los nuevos sonidos y abrir el abanico de posibilidades”, subrayó Cristina, cantante de la formación Fuel Fandango que, por primera vez, pisan estas tierras, “y está siendo un lujo”, añadió.

La guitarra, la emoción y el homenaje a “Paco” no faltó en ninguno de los escenarios que tuvieron al Flamenco como protagonista. Pero tampoco faltó la emoción, el baile, los aplausos, el reconocimiento a un arte que es raza y una demostración “de que da igual en qué idioma se cante, el flamenco, como otros estilos, demuestra que la música es universal”, concluyó Morente.