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Tras las polémicas... la película

'Pelo malo’, título venezolano ganador de la última Concha de Oro, llega a los cines españoles El filme se convirtió en arma arrojadiza entre chavistas y opositores

Gregorio Belinchón
La productora de 'Pelo malo' Marité Ugás (izquierda), y la directora Mariana Rondón, ayer en Madrid.
La productora de 'Pelo malo' Marité Ugás (izquierda), y la directora Mariana Rondón, ayer en Madrid.claudio álvarez

Hace cuatro meses y medio la directora Mariana Rondón y la productora Marité Ugás se llevaron la Concha de Oro de San Sebastián con Pelo malo. Nunca una película venezolana había ganado un festival de serie A. “El galardón nos abrió puertas de respeto, de apoyo a un proceso cinematográfico en crecimiento”. Aquel triunfo quedó empañado con el ruido mediático que provocó en Venezuela sus declaraciones a EL PAÍS sobre la situación política y social en aquel país, que ha acabado polarizado. Durante estos cuatros meses la película ha impuesto su calidad por encima de otros debates, y ha proseguido su camino triunfal festivalero: premio FIPRESCI en Tesalónica, y diversos galardones en Turín, en el argentino Mar del Plata o el chileno Viña del Mar. Ahora llegan sus estrenos comerciales: primero en España —mañana viernes—, después Francia, Suiza y Brasil, antes de llegar a Venezuela el 1 de mayo. “Salir de la ruta de festivales y confrontarla con público es emocionante”, cuenta Rondón. “También tengo ansiedad por el estreno en mi país. Nuestro distribuidor ha creído en ella y ha aumentado el número de copias. En general, los últimos estrenos patrios están siendo muy vistos por el público venezolano y eso hacen crecer las expectativas”.

Todos nos agredieron y arrinconaron en términos políticos”

La demanda creciente de los festivales por Pelo malo ha “ralentizado” el ritmo creativo de la pareja Rondón-Ugás, que en septiembre preparaban nuevo filme, esta vez de Ugás: cuando una produce, la otra dirige. “Este paseo necesario no nos ha dejado encerrarnos, como necesita el proyecto”, cuenta Ugás, peruana cuya carrera artística se ha desarrollado en Venezuela. “Pero no paramos”.

Los premios aclaran que no solo éramos bulla de prensa, sino cineastas serias”

Por pelo malo se conoce en Venezuela al cabello rizado de los negros, un cuero cabelludo que el protagonista del filme, Junior, un niño de 9 años, quiere alisar para parecerse a un cantante. Sin embargo, este cambio de peinado lo enfrenta a su madre, quien piensa que su hijo se está volviendo homosexual. “Según donde se proyecte la película se habla de distintos aspectos. En Estambul me hablaban de religión y política, en América del Sur decían que el tema era el racismo, en Europa pesa mucho más la identidad sexual. Es un espectro muy amplio”, dice Rondón. “Para mí habla del respeto al otro, a las diferencias”.

En los pasados Goya el premio a la mejor película latinoamericana se lo llevó otra venezolana, Azul no tan rosa, que también habla sobre la homosexualidad. Ugás cuenta que son muy distintas, de géneros alejados. Rondón apostilla: “Sí es cierto es que el debate sobre la homosexualidad y su aceptación en nuestra sociedad está en el aire y vienen cinco películas más centradas en el tema. El destape venezolano es el nuevo género nacional en el cine [risas]. Antes había tan pocas películas que cine venezolano era un género en sí mismo. Hoy se produce tanto que hay mucha variedad en los largometrajes”.

Sobre el jaleo posterior al certamen donostiarra por sus frases sobre Chávez y Maduro, y la polvareda levantada en Venezuela, Ugás reflexiona: “¡Qué dolor de cabeza! Para nosotros lo más triste es que desvió la atención sobre lo que de verdad nos importaba: el premio”. Rondón: “Piensa en nuestro equipo que tanto se había esforzado...”. Ugás: “La cuerda la tensaron las dos partes. Por suerte, pronto llegaron otros galardones”. Rondón: “Todos nos arrinconaron y agredieron en términos políticos. Me sentí usada incluso por periodistas. Los premios reivindicaron que no solo éramos bulla de prensa, sino cineastas con un trabajo serio e importante”.

En estos casi cinco meses no ha habido cambios sobre cómo Venezuela encara la homosexualidad, Según Rondón, “no ha pasado nada para que la visión cambie. Pero la película es más amplia que la temática homosexual, y eso me lo ha confirmado el recorrido festivalero. Puede que en San Sebastián lo dudara; hoy tengo claro que acerté con el ejercicio de equilibrio de puertas abiertas y miradas amplias que hice para que el espectador buscara su lugar en la historia”.

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Sobre la firma

Gregorio Belinchón
Es redactor de la sección de Cultura, especializado en cine. En el diario trabajó antes en Babelia, El Espectador y Tentaciones. Empezó en radios locales de Madrid, y ha colaborado en diversas publicaciones cinematográficas como Cinemanía o Academia. Es licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense y Máster en Relaciones Internacionales.

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