_
_
_
_
_

El gran juez Internet se retrata sobre la escena

'Haz clic aquí' se basa en un caso real que atrapó el ojo público y nos invita a reflexionar sobre nuestra responsabilidad en la Red

La obra teatral 'Haz clic aquí'.
La obra teatral 'Haz clic aquí'.

Es tan aséptico y sencillo como hacer un clic. En la realidad virtual, se puede mostrar aprobación o rechazo, se puede señalar y comentar de manera anónima, se puede construir una imagen hecha a la medida de nuestra fantasía, uno es dotado con el poder de participar sin que haya más mediación que ese teclado, esa pantalla, y esa conexión… Haga clic… ¿Sucede algo ahí fuera? ¿Qué impacto tienen nuestras acciones en la Red sobre la realidad? El gran ojo de Internet, que todo lo capta y lo escupe, ha sido el motivo que ha inspirado a José Padilla (Santa Cruz de Tenerife, 1976) para la escritura de su obra teatral Haz clic aquí, una orden simple que abre posibilidades muchas veces incontrolables. La pregunta sobre nuestra responsabilidad en el ciberespacio llena la escena de la Sala de la Princesa del Teatro María Guerrero de Madrid desde este miércoles hasta el 15 de diciembre.

“¡Mátalo!”. Aquel video se convirtió en un fenómeno viral. Seis jóvenes se lanzaron a golpes contra otros tres a las puertas de una discoteca en la avenida de la Constitución de Granada en una madrugada de enero de 2011. Una chica remató con su tacón a uno de ellos que estaba tendido en el suelo. El abogado Rafael Alba lo grabó todo desde la ventana de su piso y después de que los agredidos decidieran no presentar cargos, colgó el vídeo en YouTube con un mensaje en que expresaba su repugnancia por que aquellos individuos se hubieran tomado la justicia por su mano. Pedía ayuda ciudadana para identificar a los jóvenes. En solo tres días, hubo 80.000 visitas en YouTube, 3.200 meneos en Menéame y decenas de hilos de conversaciones en foros. De ahí a que los foreros se lanzaran a hacer el trabajo de la policía hubo solo la separación de un clic. A través del rastreo de cuentas de Facebook y de Tuenti se llevó a la detención virtual de los sospechosos, cuyos nombres llenaron el ciberespacio. La chica a la que acusaban de haberse servido de su zapato para el remate de la paliza era una menor, que comenzó a recibir mensajes con insultos y amenazas. Se habían vuelto las tornas, y los foreros, el gran hermano Internet, se tomaban la justicia por sus fueros.

La historia que se relata en Haz clic aquí está basada en estos hechos. “Trato de hacer una reflexión sobre nuestra responsabilidad en la Red, lo que compartimos, las consecuencias que tienen nuestras acciones…”, explica Padilla, quien declara a su vez su admiración por Internet “como foro de unión, medio de transmisión, de mejora, de pensamiento…”. Al mismo tiempo, “porque es inmediato y sin trabas, no está de más preguntarse cómo lo usamos y qué capacidad tenemos para construir un mundo mejor… No trato de dar respuestas ni ser panfletario…”. ¿Es la chica culpable o no, y por qué la cacería virtual se ceba con ella? ¿Se tiene derecho a crucificar a esa persona?

El montaje se despliega en la serie de cruce de vidas que provoca el juicio a través de Internet, y el personaje de Ruth Verín, la supuesta chica del tacón de aguja, se convierte, según el autor y director del montaje, “en el objeto de deseo para muchos fines distintos”. Al argumento de la obra se une el personaje de la pareja del abogado que cuelga el video en la Red, una periodista que trabaja para la sección de Gente de un diario local, y que también desea su parte del jugoso pastel informativo.

José Padilla invita con el título a pensar y valorar en la orden “Haz clic aquí” y en la repercusión de un acto que se ha hecho tan cotidiano para millones de personas. “No quisiera caracteres que captaran nuestra adhesión o repulsión instantáneas, no importa si han sido ellos o no los culpables de las acciones que se les atribuyen, si sus motores son éticamente reprobables (…) Me gustaría poner al público en esa tesitura, la de saberse jueces prematuros”.

El montaje forma parte del programa para nuevos autores Escritos en la escena del Laboratorio Rivas Cherif que el Centro Dramático Nacional ha creado para la investigación del hecho teatral. En dos meses los dramaturgos tienen la posibilidad de terminar de escribir las obras en propia escena, con el ensayo con los actores que aportará nuevas soluciones teatrales y literarias.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_