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“Custer tuvo lo que se merecía”

Edward K. Flagger: El historiador que comprendía a los indios

Jacinto Antón
Edward Frangler, escritor antropólogo especializado en la etnohistoria de las culturas indígenas del Suroeste de los Estados Unidos en su casa de Barcelona
Edward Frangler, escritor antropólogo especializado en la etnohistoria de las culturas indígenas del Suroeste de los Estados Unidos en su casa de BarcelonaConsuelo Bautista

Pregunta. Aquel día aciago para el Séptimo de caballería en Little Big Horn, de haber cabalgado con el general Custer ¿qué le habría dicho usted que sabe tanto de indios?

 Respuesta. No lo hagas. No ataques. No tenía ninguna posibilidad.

P. ¿Y usted qué hubiera hecho en aquella tesitura?

R. Si puedo me largo. No soy ningún valiente. Por eso me enrolé en la marina —el verano del armisticio en Corea— y no en el ejército, como hizo mi hermano.

Perfil

Le digo emocionado al historiador Edward Flagler (Evanston, Illinois, EE UU, 1934), autor de libros como Tambores indios,que hace 30 años hice un curso de indios de las praderas con él y me dio un diploma. Contesta con sobriedad chiricahua: “Vaya, el mundo es pequeño”. ¿La peor película de indios? que ha visto?“ Puah, hay tantas. Te diré la mejor: 'Un hombre llamado Caballo'. Los indios eran así, impredecibles; a veces te mataban, otras te incorporaban a la tribu”.

P. Custer, es sabido, llevaba un periodista en el regimiento, Mark Kellogg. Los indios lo mataron. ¿Tenemos que tomárnoslo como algo personal?

R. Dudo que supieran lo que era un periodista.

P. ¿Le cae mal Custer?

R. Sí, bastante. Tuvo lo que se merecía.

P. Pero no lo mutilaron como al resto. ¿Sería por admiración?

R. Podría ser. Es peligroso generalizar con los indios.

P. Dígaselo a él. Se ha pasado usted toda una vida estudiando a los indios y escribiendo sobre ellos, libros como Defensores de la Madre Tierra o Tambores indios. ¿Qué ha aprendido?

R. Que esencialmente el género humano es igual en todas las culturas.

P. ¿Ninguna lección?

R. La paciencia.

P. ¿Cuáles son sus indios favoritos?

R. Me gustan todos. Quizá los del sudoeste, los que más he estudiado, los navajos, los pueblo..

P. ¿Qué tribu no le hubiera gustado que le capturara vivo?

R. Mmmm. Varias. Los iroqueses, quizá, y los hurones. Te mataban muy lentamente. Los apaches tenían aquella enervante costumbre de enterrarte hasta el cuello y cubrirte de miel la cabeza para que te comieran las hormigas rojas.

P. Eran gente cruel. Y no me hable de relativismo cultural: miel y hormigas, ¡qué mala baba!

R. Cruel… depende. Más duros, quizá. Quemaban gente en el poste a veces, pero eso también lo hemos hecho nosotros. Insisto en que había, y sigue habiendo, muchas culturas indias diferentes. Te pondré un ejemplo. Cuando el activista Russell Means, sioux, recientemente fallecido, visitó a los navajos les hizo una danza del sol, la ceremonia que incluye colgarse de ganchos en el pecho y tirar hasta que te arrancas la carne y que es uno de los grandes ritos lakota. Pues bien, los navajos se horrorizaron. Para ellos el cuerpo humano es sagrado y uno mismo no debe hacerse daño. Means se quedó desconcertado, porque los lakota han luchado mucho por recuperar la danza del sol en la que se sufre por el bienestar del pueblo.

P. ¿Era más difícil que la nuestra la vida de los indios?

R. Bueno, era la normal para ellos. Para los indios de las praderas, cuando desapareció el bisonte, ¡eso sí que fue una crisis!

P. ¿Qué nos costaría más aceptar de su mundo, aparte de la precariedad de la vida? ¿La comida?

R. No creas. Maíz, calabacín, judías, el arroz salvaje de los menominee, que hoy se vende en Caprabo; el búfalo en las praderas… ¿Sabes que los apaches no comían pescado? Tenían un tabú que les impedía comer cualquier cosa con escamas.

P. ¿Era habitual la violencia de género?

R. En algunas tribus era corriente pegar a las mujeres. Pero en otras tenían un papel preponderante. Los iroqueses eran una cultura matrilineal. Las mujeres ejercían un mandato sutil.

P. ¿Cómo era el sexo en las praderas?

R. Imagino que como en todas partes.

P. ¿Existía el nacionalismo entre los pieles rojas?

R. Pues algo así. Un sentido fuerte de comunidad, y de enemistad con otras tribus.

P. Valore a los líderes indios.

R. No me atrevería.

P. Venga. A alguno admirará más como político.

R. Todos hicieron lo que pudieron.

P. ¿Toro Sentado?

R. Buen líder, condujo bien a su gente.

P. ¿Cochise?

R. Luchó en la medida de sus posibilidades.

P. ¿Tecumseh?

R. El jefe shawnee, también muy bueno.

P. ¿De qué tribu sería Aznar?

R. ¡Por favor!

P. Eso de que los Navy Seal denominasen Gerónimo a Bin Laden al ir a matarlo. Le habrá molestado.

R. Les ha molestado a ellos, a los indios, que consideran a Gerónimo un héroe. No sé, las fuerzas especiales de EE UU, de las que formó parte mi hermano Jack, han heredado técnicas de lucha aprendidas de los indios.

P. ¿Qué le gustaría ver de aquel mundo desaparecido. ¿Un poblado cheyenne?

R. Una firma de la paz, cualquiera que fuera duradera. Tengo pipas de la paz en casa.

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Sobre la firma

Jacinto Antón
Redactor de Cultura, colabora con la Cadena Ser y es autor de dos libros que reúnen sus crónicas. Licenciado en Periodismo por la Autónoma de Barcelona y en Interpretación por el Institut del Teatre, trabajó en el Teatre Lliure. Primer Premio Nacional de Periodismo Cultural, protagonizó la serie de documentales de TVE 'El reportero de la historia'.

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