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De la sala negra al cubo blanco

Varias exposiciones celebran el feliz matrimonio entre cine experimental y pintura

Fotograma de una de las piezas de la cineasta Chick Strand.
Fotograma de una de las piezas de la cineasta Chick Strand.

Cine y pintura, unidos, mezclados e incluso enfrentados, llevan décadas escribiendo una historia conjunta que en los últimos años se ha ido intensificando. El cine experimental, aquel que se llamó de arte y ensayo, vive un auge sin precedentes. Una exuberancia que se refleja en múltiples iniciativas y en la presencia cada vez mayor de proyecciones de cine en las salas de museos y galerías, y de obras de artes plásticas que abordan temáticas y problemáticas más propias del ámbito cinematográfico.

"En los últimos años, el cine ha sido la gran novedad de las principales colecciones de los museos de arte del mundo. Cine experimental, de ensayo o documental creativo, se trata de un cine esencial que hoy transita de la sala oscura al cubo blanco. Una tendencia que abordamos pidiendo a los responsables de cine de algunas de las principales colecciones del mundo una selección personal y a la vez representativa de las joyas de sus arcas", explica Carolina López, directora de Xcèntric, el programa audiovisual estable del Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona (CCCB). Xcèntric dedica varias sesiones de su 12ª edición al Cine en los museos, empezando con la selección del Centro Pompidou de París, realizada por Philippe-Alain Michaud, que incluye obras de maestros como Marcel Duchamp, Joseph Cornell, Ken Jacobs, Jack Smith y Bruce Conner junto a autores casi desconocidos.

A lo largo de la temporada habrá más presentaciones de las colecciones del Macba y el MOMA de Nueva York, entre otras. Además Xcèntric, que se inaugura mañana con Shirley Temple story, una obra delirante de Antoni Padrós que desmonta los mitos del Hollywood clásico, reivindica especialmente la figura de este singular cineasta, cuya obra íntegra acaba de ser adquirida por el Museo Reina Sofía de Madrid.

En los últimos años los filmes han sido la gran novedad de los museos

Para visibilizar la intersección de lenguajes y conceptos que se da entre el arte y el cine, el galerista Joan Anton Maragall ha invitado ocho artistas a dialogar sobre la película Aita, de José M. de Orbe, premio a la mejor fotografía en el certamen de San Sebastián 2010. El resultado se plasma en la muestra 8+1: un diálogo entre pintura y cine, abierta en la galería Trama de Barcelona, que explora las conexiones entre pinturas, algunas inéditas y otras preexistentes, y determinadas escenas de Aita. "No nos conocíamos previamente y, sin embargo, las resonancias entre nuestras obras son evidentes. Cada uno despliega en el lienzo o la pantalla un entramado de signos propios, pero todos convergen en un gran tema común: el paso del tiempo y su huella estética", asegura José M. de Orbe.

El cineasta, que vio proyectada recientemente Aita en el MOMA, está convencido de que "de las diversidades técnicas y las particularidades de cada mirada surge una nueva visión más compleja y enriquecedora, que aporta nuevos matices en la contemplación de las formas expresivas".

Por su parte, el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) y la Filmoteca de Cataluña se proponen establecer un diálogo entre pintura y cine a través de 29 películas que conforman el programa Por amor al arte.El ciclo pretende reflexionar sobre diferentes aspectos del mundo del arte, la relación entre el artista y su modelo en relación al cineasta y sus actores, así como la pujante influencia recíproca entre la vertiente más artística del cine y la más cinéfila de la pintura.

¿Idilio? Más bien una larga relación

Los orígenes.  Jean Luc Godard, Orson Welles, Vincent Minnelli, Andrei Tarkovsky, Carlos Saura, Roberto Rossellini, Victor Erice, Éric Rohmer... Son los grandes nombres de la historia que se han servido del arte como excusa cinematográfica, bien sea basando sus historias en las vidas escasamente ejemplares de artistas como Vincent van Gogh, Jean Michel Basquiat, como llevando un paso más allá el lenguaje cinematográfico.
La cara. Otros cineastas menos conocidos en nuestras fronteras han unido de forma más evidente el arte con el cine: Otar Losseliani, James Scott, Floreal Peleato, Martin Prevost, Charles Matton o Peter Watkins.
29 películas. Por amor al arte. Cada proyección del ciclo que organiza el MNAC con la Filmoteca estará acompañada por una charla de un especialista sobre la película y las problemáticas artísticas que plantea. Gracias al diverso perfil profesional de los ponentes será posible ver las piezas desde diferentes perspectivas.

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