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El banderillero El Chano, con fractura vertebral tras ser arrollado por un toro

El subalterno, que no siente las piernas de las rodillas hasta los pies, sufrió el percance en Ávila

El banderillero Vicente Yangez, El Chano,sufrió anoche una "fractura de la vértebra L1" como consecuencia de un grave percance en la primera novillada del certamen La Muralla de Ávila, informaron fuentes del entorno del subalterno madrileño. El percance sucedió en el tercio de banderillas al sexto novillo del festejo, de la ganadería de La Glorieta, cuando el astado se arrancó y arrolló a El Chano. Horas después, el banderillero ha admitido, con una entereza fuera de lo normal, que su futuro "en la profesión es inexistente".

"Sé perfectamente lo que tengo, lo sé desde el momento que caí al ruedo y noté como me estallaba la vértebra. Esto tiene muy mala pinta, pues no tengo sensibilidad alguna en las piernas, y ahora solo toca esperar a que los doctores me confirmen que es el final definitivo", ha declarado hoy en conversación telefónica. "Aparte de la fractura de la vértebra L1, me han dicho que tengo una fisura en la médula espinal, eso lo confirmarán cuando me operen, pero sé que lo que tengo es muy gordo. El novillo de anoche me ha buscado la ruina. Pero no queda otra que tirar para adelante por muy duro que sea a partir de ahora. No me voy a derrumbar y, sobre todo por los míos, voy a luchar muchísimo", ha manifestado.

El Chano, que actuaba a las órdenes de la novillera Milagros del Perú, resultó aparatosamente volteado, "cayendo de forma muy fea sobre el cuello, quedándose inmóvil y boca arriba en el ruedo", señalaron fuentes de su entorno.

"El novillo estaba muy refugiado en tablas, no quería saber nada de la pelea, pero ya llevaba muchos capotazos, y para evitar que le pegaran más opté por tratar de ponerle un par al sesgo, de dentro a fuera, pero justo en el momento que fui a por él, el animal se arrancó con mucha fuerza, me cortó el viaje y me llevó por delante", ha recordado el subalterno.

"En cuanto caí al ruedo noté un crujido muy fuerte en las vértebras"

"En cuanto caí al ruedo noté un crujido muy fuerte en las vértebras, y de inmediato dejé de notar las piernas, como si me hubieran cortado los hilos y me las hubieran desconectado. Cuando me llevaban a la enfermería ya sabía lo que tenía, e incluso le dije a alguien, no se a quien, que aquí se había acabado mi carrera", ha referido El Chano.

En la enfermería, los doctores no apreciaron ninguna cornada, sin embargo, la gravedad del percance se descubrió cuando el banderillero confirmó que "no sentía las piernas", manifestaron las fuentes. Tras una primera exploración, se optó por trasladarle al hospital Clínico Universitario Virgen de la Vega, de Salamanca, donde se encuentra ingresado, para ser sometido a diversas pruebas por especialistas en neurocirugía que, finalmente, dictaminaron la fractura de la vértebra L1.

"La noticia más esperanzadora es que puede mover las manos y los brazos, e incluso responde a estímulos en los muslos, sin embargo, el problema viene desde las rodillas hasta los pies, donde no siente absolutamente nada", apostillaron las fuentes.

Los doctores están a la espera ahora de que baje la inflamación en la zona para que El Chano sea sometido a más pruebas que puedan concretar la gravedad de la lesión, "si ha dañado la médula o no, y cómo puede afectarle en el futuro". El Chano permanecerá varios días ingresado en el hospital salmantino, aunque su deseo es trasladarse al hospital de Getafe (Madrid), muy próximo a su domicilio de Parla, para estar acompañado de sus familiares y amigos, aunque eso dependerá de su evolución en las próximas 48 horas.

"No sé como será mi vida a partir de ahora, pero no voy a entregar la cuchara, sé que si no voy a poder andar nunca más hay otras alternativas para seguir disfrutando de la vida y de mi gente. Aquí queda mucho Chano todavía, aunque sé que nunca más podré ponerme delante de un toro", ha concluido el banderillero.

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