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'Mujeres Desesperadas' echa el cierre con polémica

La demanda de la actriz Nicolette Sheridan contra el creador de la serie, Marc Cherry, revela las tensiones surgidas en el set de rodaje

Imagen promocional de 'Mujeres desesperadas' cuando Edie Britt era miembro del reparto
Imagen promocional de 'Mujeres desesperadas' cuando Edie Britt era miembro del reparto

Una serie donde los puñales vuelan y donde las tumbas se cavan con una prodigiosa rapidez sólo podía acabar de un modo: con juicio. Y no dentro de la ficción, sino fuera de ella. Han sido ocho temporadas, y Mujeres Desesperadas echa el telón en EE UU el próximo 13 de mayo (en España en Fox en junio). Quedan cuatro episodios. La suerte está echada. Uno de los veteranos ha fallecido por un disparo. Y otro de los personajes muertos, la incombustible Edie Britt (Nicollette Sheridan), se ha dedicado a airear los trapos sucios de productores y actrices en un juicio que ha sido tan trepidante como la serie misma.

Nada se ha dado por seguro en la ficticia calle de Wisteria Lane en los pasados ocho años. Ninguna vida ha estado a salvo. ¿Qué se podía esperar de una serie que comenzó con el suicidio de Mary Alice Young (Brenda Strong) en 2004? Personajes siniestros, como el psicópata ávido de venganza David Dash (Neal McDonough), que buscaba vengar la muerte de su familia en la quinta temporada, han sembrado el caos. Otros, como el padrastro abusador de Gabrielle Solis (Eva Longoria) han muerto esta temporada a manos de otro protagonista, provocando una intensa ruptura entre las amas de casa.

Era ya hora, de todos modos. La serie arrancó, en el canal ABC, con una media de 23 millones de espectadores por episodio, según la consultora Nielsen. La audiencia ha ido decayendo de forma lenta e inexorable. Este año, los índices no superan los nueve millones. En marzo es la serie de ficción número 17 más vista de EE UU. Los fieles espectadores ‘desperadófilos’ han tenido doble emoción este año. Junto a la temporada de despedida, con numerosos giros de guión, han tenido la oportunidad de gozar del juicio de la actriz Sheridan contra el productor y creador de la serie, Marc Cherry.

Sheridan fue despedida en 2009, cuando Cherry mató a su personaje, Edie, mediante electrocución en plena calle. La despedida no fue pacífica. Sheridan demandó a Cherry. Alegó que él le había dado un golpe en la cabeza en el estudio, que ella había contactado a su abogado y, en consecuencia, y de forma forzada, su personaje había muerto de la noche a la mañana. El juicio se celebró este año. La semana pasada, el jurado se declaró incapaz de alcanzar un veredicto, y anuló los procedimientos. Ahora se deberán repetir. Sheridan pide una compensación de casi seis millones de dólares.

En los testimonios se airearon todo tipo de trapos sucios. Si en la ficción Eddie y Susan Mayer (Teri Hatcher) eran vecinas y archienemigas, en la vida real las actrices no se llevaban mucho mejor. Cherry dijo en el juicio que a la última le enervaba el hecho de que Sheridan olvidara siempre sus frases y llegara tarde a los rodajes. Añadió, además, que Longoria y Felicity Huffman (Lynette Scavo en la ficción) se manifestaron “aliviadas” cuando Sheridan fue despedida.

Gracias a la serie, Cherry se ha convertido en una fuerza formidable de la ficción televisiva en Hollywood. Se formó como guionista y productor en los años 90 en ‘Las Chicas de oro’. Aplicó aquella fórmula, de cuatro mujeres de carácter fuerte cuyas vidas quedan entrelazadas por dramas y situaciones jocosas, en ‘Mujeres Desesperadas’, una serie a la que le añadió el suspense, dramatismo y un colorismo ‘kitsch’. Ahora ya trabaja en su próximo proyecto, Devious Maids (Criadas engañosas), del que ABC ha comprado ya un episodio piloto.

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