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Reportaje:

Manifiesto para el libre albedrío

Una fundación estadounidense subasta con fines benéficos carteles autógrafos de Shepard Fairey, el diseñador del icono de Barack Obama

Hace tres años le ofreció una esperanza a Barack Obama. Era ese el mensaje que llevaba el cartel que Shepard Fairey dibujó para la campaña presidencial del entonces poco conocido senador de Illinois. El resultado fue una carrera sensacional hasta la Casa Blanca. Ahora la esperanza, además de una buena cantidad de dinero, Fairey espera ofrecérsela a la Coalición de los Sintecho. A esa organización serán destinados los fondos que recaude Artist as Activist, una iniciativa que inaugura este año la Fundación benéfica Robert Rauschenberg y que subastará 100 copias de un cartel autógrafo de Fairey.

Las bolsas se desploman, la prima de riesgo sube sin parar, aumentar es el único verbo que se asocia al desempleo. Muchos entre los siete millones de habitantes de este planeta tienen la impresión de no tener ni una carta que jugar en el partido que decide su destino. A ellos se dirige el cartel de Fairey que la Fundación Robert Rauschenberg ha escogido como símbolo del proyecto. "El futuro no está escrito", reza un libro abierto debajo de una rosa roja que nace de un alambre de espino. Es ese el titular de una imagen que también lanza un mensaje de "libertad, acogida, igualdad".

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Para el optimismo en tiempos de tinieblas Fairey tuvo que tirar de varias fuentes. "La frase es del líder de The Clash, Joe Strummer; el estilo recuerda al art Nouveau y el art Deco, movimientos que coincidieron con la Grande Depresión de 1929. Y la rosa transmite la idea de que de lo negativo puede nacer lo positivo", declaró el artista a propósito de su creación.

"Fairey comparte nuestra creencia de que el arte puede cambiar el mundo", explica Chirsty MacLear, director ejecutivo de la Fundación Robert Rauschenberg en su página web. Y eso espera la Coalición de los Sintecho, la mayor organización estadounidense que se dedica a intentar ayudar a las miles de personas que duermen por la calle en EE UU.

La Fundación Robert Rauschenberg fue creada en 1990 por ese artista para recaudar fondos a favor de causas como la lucha contra el sida, la preservación del patrimonio natural y las operaciones de la ONU para el mantenimiento de la paz en contextos de conflicto. El propio Rauschenberg se hizo famoso creando carteles compuestos por collages de imágenes que denunciaban el apartheid o instaban a cuidar el planeta. Ahora Fairey es el primero en recoger su legado, que otros artistas defenderán en los próximos años. Todavía se desconoce quiénes serán, pero, ya saben, el futuro no está escrito.

El cartel de Obama.
El cartel de Obama.AP
El cartel de Shepard Fairey subastado por la Fundación Robert Rauschenberg.
El cartel de Shepard Fairey subastado por la Fundación Robert Rauschenberg.SHEPARD FAIREY (OBEY/GIANT)
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