Ex condenados a morir, reunidos para un anuncio
Cuatro sentenciados en EE UU recorren el Camino de Santiago para un 'spot' de televisión
Son cuatro auténticos supervivientes, cuatro tipos que un buen día renacieron, tras años en los que pensaron que su vida terminaría con una inyección letal. A pesar de ser inocentes, terminaron condenados a morir en EE UU por crímenes que no habían cometido. Son Ray Krone, Derrick Jamison, Shujaa Graham y Ronald Keine, protagonistas del nuevo anuncio de Aquarius. La marca de bebidas, cuyas campañas en el pasado siempre se han distinguido por apoyar diferentes causas sociales, supo de la existencia de estos hombres gracias a un reportaje publicado en EL PAÍS SEMANAL el pasado enero. Aquel trabajo, titulado en portada "El club de los resucitados" , narraba aspectos de una reunión privada celebrada en Birmingham (Alabama, EE UU) por 21 ex condenados a muerte y sus familias. Durante cinco días, el dominical de EL PAÍS tuvo la oportunidad de convivir con estas personas, que hoy día forman parte de la ONG Witness to Innocence.
Tres meses después de la publicación del reportaje, cuatro de aquellos hombres fueron invitados a España por Coca-Cola: "Aquarius es una marca que cuenta historias maravillosas, de gente que hace cosas sorprendentes. Cuando vimos la historia en EL PAÍS nos llamó mucho la atención cómo estas personas, a pesar de todo lo que habían pasado, hablaban con un sentimiento tan positivo. Por ello les invitamos a hacer el camino de Santiago, por lo que el camino significa y lo que envuelve. Y así poder acompañarlos en su reencuentro consigo mismos y con el ser humano. Una experiencia que ha sido muy positiva para ellos, ya que les ha devuelto el sentimiento de paz y bondad el mundo", defiende Félix Muñoz, director de comunicación de Coca-Cola España.
El próximo mes de octubre, Shujaa Graham y otro de sus compañeros exonerados, Juan Meléndez, visitarán España para participar en distintas conferencias. Es parte del trabajo que Witness to Innocence realiza, dentro y fuera de las fronteras de EE UU, en su lucha contra la pena capital.
